Distribución

Cuando el agua sale de la planta potabilizadora da comienzo un nuevo proceso en el Ciclo llamado Distribución que consiste en hacer llegar el agua a los hogares siempre en las mejores condiciones. Este proceso se compone de dos fases: Distribución en Alta y Distribución en Baja, y en ambas entra en juego una importante red de distribución respaldada por una tecnología de última generación que asegura un servicio de máxima calidad.

Distribución en Alta

Una vez que en el depósito de cabecera o en la planta potabilizadora se ha tratado el agua para hacerla apta para consumo humano, sólo queda llevarla hasta la población, una tarea que se realiza en tres fases:

Aducción

Esta actividad consiste en el transporte del agua desde el depósito de cabecera o la planta potabilizadora hasta la entrada de las poblaciones mediante una red arterial de tuberías. El proceso de potabilización no tiene lugar necesariamente cerca de la población abastecida, lo que aveces hace que tenga que ser bombeada hasta llegar a su destino.

Red de Distribución

Ya en la población, el agua se distribuye a través de un entramado de tuberías de distinto tamaño o diámetro, de manera que a cada punto de suministro le llegue la presión acordada y en la cantidad necesaria.

Gestión Integral mediante telemando integrado

En esta fase, SASTESA controla que el caudal de agua que llega al municipio, la presión y el posicionamiento de las válvulas sea el correcto al tiempo que se asegura del buen funcionamiento de pozos y rebombeos.

A lo largo de la red hay elementos de control, de seguridad, de desinfección y de impulsión que garantizan de forma activa la mejor distribución del agua.

Distribución del Agua en Baja

Esta fase es una de las más importantes del Ciclo Integral del Agua.   

Una vez que el agua ha llegado a las diferentes poblaciones, es necesario llevarla desde los pozos o las tuberías hasta las entradas de casas e industrias. A estas tuberías que permiten que el agua potable llegue a cada domicilio se les llama acometidas.

¿Por qué es tan importante esta fase? Porque en esta etapa tratamos directamente con los usuarios. Por eso, el mantenimiento de la red de distribución en óptimas condiciones de operación es el reto diario de Sastesa.